Llegó el verano nuevamente y con él las vacaciones o los momentos de playa y piscina. Momentos en los que estamos muchas horas casi desnudos solo en bañador o bikini, descalzos y por lo tanto somos mucho más vulnerables y sube la probabilidad de distintos eventos que aumentan en playas y piscinas, vamos a ver estos cuales son:
En la playa hay unos clásicos que siempre se van a dar, vamos a verlos uno a uno.
El niño pequeño que se extravía pudiendo hacer antes de que esto ocurra estas distintas pequeñas cosas:
- Comprar unas pulseritas de tela que son muy económicas en las que podemos escribir su nombre, un teléfono de contacto y su Grupo Y RH sanguíneo.
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Podemos enseñarle si es un poquito mayor a que tome una referencia de donde nos hemos ubicado pero que esta no sea de una sobrilla (van y vienen) si no de un puesto de socorrismo, un edificio, etc.
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En caso de encontrarnos a un pequeño lo mejor es subirlo sobre nuestros hombros, decir su nombre fuerte si es capaz de decírnoslo y hacer esto entrados en el agua (uno dos metros) un poquito, o buscando un espacio que nos haga ser más visibles.
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Picadura de medusa, mordisco de cangrejo o un corte en un pie con una piedra, cristal etc. La propia agua del mar ayuda a desinfectar y en cada caso hasta que se apliquen los primeros auxilios secar la zona y curar estas pequeñas heridas que no suponen casi nunca peligro alguno.
En la piscina las caídas, los golpes, las picaduras de avispas o de abejorros y el ahogamiento son los eventos más comunes.
En los ríos los mismos eventos que en las piscinas pudiéndoles sumar los pequeños cortes y arañazos por las piedras o rocas y recordando que hay que prestar una especial atención a las corrientes, aunque estemos con el agua por debajo de nuestras rodillas.
Es recomendable que la ropa de baño de los mas pequeños sea de color rojo, naranja, amarillo, blanca lo que permita verlos bien en el agua.
Recuerden que un chiquitín se puede ahogar en muy poco tiempo y en 20-25 cm de agua en altura, especial atención también si los dejamos en pequeñas piscinas inflables o en la bañera.
Las maniobras de reanimación de los niños no se hacen igual que la de los adultos, dejen siempre intervenir a quienes las conozcan y las hayan practicado.
